Normativa Europea

Desde el 1 de julio de 2025, todas las secadoras de ropa deben cumplir con la nueva normativa europea de etiquetado energético. Este cambio responde a la necesidad de reajustar la escala de eficiencia y adaptarla a los modelos más avanzados con tecnología de bomba de calor, capaces de ofrecer un consumo mucho más eficiente.

La nueva etiqueta establece una escala simplificada que va de la A a la G, eliminando las antiguas categorías A+, A++ y A+++, que solían generar confusión. Este reajuste no implica que los electrodomésticos sean menos eficientes, sino que la evaluación es ahora más exigente y precisa. Por ejemplo, una secadora que antes se clasificaba como A+ o A++, pasa a ser considerada de Clase E dentro de los nuevos parámetros.

Además, el diseño de la etiqueta es ahora más completo y fácil de entender, mostrando la información más relevante, como la capacidad de carga, la duración del ciclo ECO, el nivel de ruido y el consumo energético en kWh por cada 100 ciclos de secado (en lugar del consumo anual, basado en 160 ciclos). Además, incluyen un código QR con acceso directo a la ficha técnica del aparato en la base de datos europea EPREL.

Secadoras de condensación con bomba de calor

Con la entrada en vigor de esta normativa, desaparecen las secadoras de condensación tradicionales, reemplazadas por modelos más eficientes con bomba de calor. En lugar de utilizar resistencias para calentar el aire, incrementando el consumo, las secadoras con bomba de calor reutilizan el aire caliente tras condensar la humedad, sin necesidad de generar calor adicional. Gracias a esta tecnología, consumen menos de la mitad de energía en comparación con una secadora tradicional.

Otra gran ventaja es que trabajan con temperaturas más bajas, siendo menos agresivas con la ropa y manteniendo las prendas en mejor estado por más tiempo. Al mismo tiempo, se trata de una solución Eco-Friendly, que aprovecha de forma más eficiente el calor, ofreciendo un importante ahorro energético, mayor cuidado de las prendas y un menor impacto ambiental.